martes, 29 de julio de 2014

Reseña: Bear In Heaven - Time Is Over One Day Old



Es la champaña hecha música: burbujeante, seductora e hipnótica.


En una carrera de esas comparables a la de bandas como The Faint o Mutemath por no ser paralelas a ninguna escena en Norteamérica, los Bear In Heaven son sin duda uno de los mejores prospectos que haya aportado ese lugar del mundo alguna vez. Encabezados por Jon Philpot, sedujeron a esa máquina del hype llamada Pitchfork para considerarlos una de las bandas revelación del 2010 con su segundo trabajo, Beast Rest Forth Mouth. Ahora llegan con un cuarto álbum, Time Is Over One Day Old, el primero con la disquera Dead Oceans.

Para esta nueva aventura de la banda se nota algo más de variedad un tema tras otro al incorporar momentos con guitarras más densas en “Time Between” y “The Sun And The Moon And The Stars”, decididas bien a sacudirte, o bien a darte algo de paz interior. La que abre el álbum, “Autumn”, se sostiene en una línea de bajo potente y una batería contundente como nunca se le había visto al trío neoyorkino.

“If I Were To Lie” con sus ritmos ligeramente disco se hace la más festiva del álbum, mientras que “Demon”, “Way Off” y “Disolve The Walls” son crudas y envolventes al estilo de los Radiohead de Kid A. Son indudablemente las más oscuras de las 10 canciones, conformando una suite de krautrock, synthpop y tecno que si se mira con relación a lo hecho por la indietronica y la EDM en los últimos tiempos, parece totalmente fuera de contexto en comparación.

“Memory Heart” opta por un estilo más tribal donde la percusión es la clave, mientras que “They Dream” es puramente sintética. “You Don’t Need The World” cierra el álbum de forma bastante soñadora.

A pesar de ser algo más variado un tema tras otro comparado con sus trabajos anteriores, en líneas generales Time Is Over One Day Old conserva la idea principal, básica, importante del sonido de Bear In Heaven: la de hacer que la música sea una inmensidad donde todo es posible, en canciones de 3 o 4 minutos de duración. Es la champaña hecha música: burbujeante, seductora e hipnótica.

Mi recomendada es “The Sun And The Moon And The Stars”. Es elegante, sofisticada, perfecta para escuchar después de un día largo en el trabajo. Es como si te reconectara los signos vitales.

Aquí va "Autumn".


Calificación: 4/5

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