Reseña: No Te Va Gustar - El Tiempo Otra Vez Avanza

Encontraron a pesar de sus propias dudas una confianza renovada en su propio estilo.

El octavo álbum de No Te Va Gustar, El Tiempo Otra Vez Avanza, presentaba  retos y dudas que me atrevería a decir, nunca habían afrontado en trabajos previos. La muerte de Marcel Curuchet en 2012 puso las cosas difíciles para la agrupación uruguaya, a puertas de irse nuevamente de gira con su álbum El Calor Del Pleno Invierno. El golpe se sintió tan fuerte que incluso el vocalista Emiliano Brancciari dijo que aun con nuevo teclista a bordo, muy posiblemente la banda nunca iba a poder recuperarse de ese golpe.

No se si fue un momento de debilidad o una declaración de humildad, pero como era de esperarse el dolor por la muerte de Curuchet influyó las canciones que aparecieron en el álbum. En lo estrictamente musical, parece que en esta ocasión decidieron tocar en vivo en el estudio, en vez de hacerlo por separado y juntando todo en la producción, como hacían hasta entonces. Probablemente las canciones del disco tenían una lógica verdadera si se tocaban de forma desgarrada, en vivo, junto al resto de la banda. 

"Me Ilumina Hoy" sin embargo arranca optimista. Más guitarras llevando el peso y los vientos terciando bien. Parece decir que la banda vuelve a empezar luego de la muerte de Curuchet. "Alba" es más nostálgica y tristona. A pesar de algún punto medio reggae, va en la misma línea de la anterior. Le sigue "Detrás Del Cerro" que muestra una faceta sinfónica más bien inusual en la banda, pero que igual funciona de forma brillante. 

Vuelven a dejarle todo el peso a las guitarras en "Comodín", nuevamente retomando su versión más frentera. Buenos arreglos en los teclados y la percusión. "Paranoia" plantea en su letra una pregunta interesante: ¿Qué tan concluida está una relación cuando dices "terminamos"? Es decir, ¿tu cabeza si responde apropiadamente al final? ¿o todavía crees verla o verlo en todas partes con todo y el mal recuerdo? Buen punto para abordar las relaciones, y de paso el dolor de perder a su compañero.

"Mi Demente" destaca por dos razones: es la más pesada del álbum, y se pone en un plan mucho más rebelde y urbano de lo que acostumbran. No recuerdo que hicieran música tan densa antes. Pasamos a "La Cuerda", que en vez de hacer un gospel para un funeral como indicaría la costumbre anglosajona, hace una murga marca No Te Va Gustar para la ocasión. La mejor del álbum, por esa sola intencionalidad. El muerto parece serlo por promesas incumplidas. 

En "La Puerta De Atrás" profundizan en su herencia rioplatense y nos dan un buen himno de cantina. Uno más a la lista. Con más plan country, "Presente" mantiene esa línea, abordando ahora la idea universal de que ni pasado ni futuro importan realmente. Sólo el momento presente existe.

Para el cierre llega "Solo Vino". Va un poco por la línea de "Chau" en los instrumentos, pero aborda la pedofilia en la Iglesia Católica con bastante inteligencia y amargura. Como debe ser. "Su Sombrero" vuelve al tono más crudo del inicio, en el plan optimista que bien pueden representar cuando se lo proponen. "Viajando Sin Espada" cierra el álbum como iniciando el viaje hacia un lugar mejor, que bien saben que no existe pero al menos estuvieron cerca de alcanzar "un par de veces".

Encontraron a pesar de sus propias dudas una confianza renovada en su propio estilo. Incluso a ratos se ponen en plan de comerse al mundo como una de sus influencias: Oasis. Pero en general, es un sentido homenaje a Marcel Curuchet que bien sabe camuflarse en lo que mejor les funciona: en hacer cada vez la banda sonora del despecho por excelencia.

"Me Ilumina Hoy" es mi recomendada. De alguna forma consigue levantar el animo en medio de la predominante melancolía.

Aquí va "Paranoia".

Calificación: 4/5