miércoles, 9 de noviembre de 2016

Hace 30 años fue 1986... en el rock alternativo



Un crisol de bandas, estilos y géneros que compartían el mismo objetivo: rebelarse ante la normalidad de su época.

En alguno de los primeros capítulos de 'Hace 30 años fue 1986' decía que el rock tuvo tres formas de entenderse durante ese año: el rock de los adultos, el rock dirigido a la juventud consumista y más mainstream de la época (que incluía al glam metal), y el rock underground o alternativo, que estaba afilando sus cuchillos para tomar por asalto la música de su tiempo. En la entrega de hoy nos centraremos en esa ultima vertiente, misma que pasaba por una encrucijada bastante particular.

1986 fue el "año cero" de géneros como el shoegaze o el dream pop. Nacía la música indie tal y como la conocemos hoy. Aparece desprovista de los dilemas del post punk y su división en múltiples géneros pero con la plena convicción de querer tumbar la monotonía en la que se había convertido la música pop de los ochenta. Con ese objetivo en mente miraron para atrás, buscando inspiración en las grandes bandas de los sesenta y setenta, mezclando eso con las lecciones del punk que todavía persistían en el ambiente. En Inglaterra eso se va a traducir en el surgimiento del shoegaze y el movimiento C86 que dio alas a una serie de grupos que seguían la linea marcada por The Smiths y Orange Juice con guitarras intrincadas, voces melancólicas pero bien armonizadas, y un aura de desencanto con el mundo que les había tocado vivir.

Mientras, en Estados Unidos ya es un hecho que existe un circuito de bandas renegadas que giran por todo el país yendo entre el hardcore punk de Black Flag y los nacientes Fugazi, los más melódicos encabezados por R.E.M., Dinosaur Jr, The Replacements y Hüsker Dü, junto a otros más difíciles de clasificar como los Butthole Surfers. Ese año nacen Green Day y Pixies. El grunge ya toma alas en Seattle gracias a Green River, mientras que en California comienza a tomar forma una versión distinta del hardcore, encabezada por Bad Religion y Pennywise. Era un crisol de bandas, estilos y géneros que compartían el mismo objetivo: rebelarse ante la normalidad de su época.

Por esos días las radios universitarias pasaban auténticos himnos del alternativo. "Bigmouth Strikes Again" de The Smiths, "Some Candy Talking" de The Jesus And Mary Chain, "Fall On Me" de R.E.M., "So Alive" de Love And Rockets, "Love Like Blood" de Killing Joke... Es inevitable que la nostalgia por aquello que no se pudo vivir se ponga a volar tomando en cuenta eso. Sobre todo porque a partir de ese 1986 el alternativo tendrá un ascenso imparable hacia la cima de las listas de todo el mundo, dándose mañas para mantenerse hasta nuestros días, con todo y haber permitido que la gran industria de la música asumiera sus elementos menos subversivos para crear sus versiones más pulidas de dichos grupos.

Mencionar 10 discos de ese entonces nunca resultan suficientes, y me dolió bastante dejar varios por fuera. Entre esos, discos tan geniales como el 'Brighter Than A Thousand Suns' de Killing Joke, el 'Express' de Love And Rockets, 'Heyday' de The Church, 'London 0 Hull 4' de The Housemartins, o el homónimo de Throwing Muses.


1. Big Black – Atomizer

En un contexto dominado por el hardcore punk, el noise rock o el redescubrimiento de las melodías en grupos como R.E.M. o Husker Du, Big Black era una respuesta a todos y todo. El primer trabajo largo de la banda liderada por Steve Albini (antes de eso habían lanzado 3 EPs) es posiblemente el mejor de todos los que lanzaron. Llevaba a un extremo totalmente diferente los instintos agresivos que habían probado en el pasado Throbbing Gristle o Cabaret Voltaire, a pesar de que no eran una banda de industrial. Las letras eran el retrato de una sociedad retorcida, violenta y muy enferma. Escenas de violaciones, asesinatos y corrupción cobraban vida al ritmo de las guitarras de Albini y Santiago Durango, sostenidas por el bajo de Dave Riley y la caja de ritmos característica de la banda al fondo. Con ese álbum y temas tan arrolladores como "Kerosene", "Big Money" o "Jordan, Minessotta"; marcaron una época ya fuese por ser realmente insoportables, o porque ofrecieron adrenalina pura y dura a un publico que en realidad nunca estuvo preparado para ellos.

2. Butthole Surfers – Rembrandt Pussyhorse

Desde sus inicios Butthole Surfers fue descrito como el resultado de cruzar a los Dead Kennedys con Captain Beafheart, siendo algo que pudo llevar al extremo en su segundo álbum, 'Rembrand Pussyhorse'. Violines, pianos, teclados prolongados, grabaciones superpuestas y un aire bastante surreal en canciones como "Waiting For Jimmy To Kick" o "In The Cellar" protagonizan un trabajo que marcó un antes y un después en su trayectoria, separando sus años inocentes de aquellos donde encuentran un sonido más contundente. Para un grupo que a lo largo de su carrera se ha caracterizado por mostrar el lado más retorcido y "mal viajado"de la psicodelia como este, resulta extraño escuchar un álbum así de experimental. Y eso es mucho decir.


3. Cocteau Twins – Victorialand

Cocteau Twins fue un grupo definitivo para comprender el rock alternativo durante los años ochenta, así como para abrir paso al dream pop y el shoegaze con la técnica de tremolo aplicada por el guitarrista Robin Guthrie y la voz siempre mística de Elizabeth Fraser que prácticamente es otro instrumento más. En 'Victorialand' toman como inspiración un documental de la BBC relacionado con el Ártico y la Antártida para nombrar las canciones de acuerdo a ciertos pasajes del mismo. Para ese entonces el sonido del dúo ha completado su transformación de sus inicios post punk y góticos a un sonido todavía atmosférico pero decididamente más melódico y misterioso. Prueba de eso canciones como "Fluffy Tuffs", "Oomingmak" o "Whales Tails".


4. Nick Cave And The Bad Seeds – Your Funeral… My Trial

Nick Cave y sus "malas semillas" contradiciendo totalmente la música de su época (fuese la de corte underground o la que dominaba las listas) lanzan 'Your Funeral... My Trial', donde seguían una linea similar a la de su álbum de covers 'Kicking Against The Pricks' lanzada ese mismo año. La intención parecía ser la de poner patas arriba las melodías tradicionales con la producción más vintage posible, tomando siempre como punto de partida la visceralidad de tipos como Tom Waits o Johnny Cash, sumándole esa fascinación por los pasajes más violentos de la Biblia o sus experiencias con la heroína en una Berlín Oeste que se caía a pedazos junto a la decadencia del comunismo soviético. Probablemente por eso canciones como "Stranger Than Kindness", "The Carny", "Jack's Shadow" o la que da titulo al disco se las han ingeniado para perdurar hasta la fecha en su repertorio.


5. R.E.M. – Lifes Rich Pageant


Luego de superar una etapa complicada el año anterior durante las grabaciones de 'Fables Of The Reconstruction', R.E.M. decide comenzar a labrar su camino para llegar al punto máximo de su popularidad con 'Lifes Rich Pageant'. Los ritmos eran más alegres, las letras son menos reflexivas (aunque mantienen ese gusto de Michael Stipe por las metáforas) y algunas curiosamente parecían reflejar su conciencia ecológica como es el caso de "Fall On Me" y "Cuyahoga". Comparado con otros trabajos de la banda en los ochenta no es uno tan bueno, pero es la bisagra que separa su primera etapa más inocente frente a otra donde son más conscientes de sus habilidades y las aplican para llegar al éxito internacional.


6. Sonic Youth - EVOL

Luego de llevar al limite sus instintos noise, Sonic Youth decide que es momento de pasar a experimentar más con momentos más lentos pero sin hacerse por eso más accesibles con 'EVOL'. Momentos inquietantes como "Shadow Of A Doubt" pueden convivir con la adrenalina de "In The Kingdom #19" o la típica melodía college rock de "Starpower". Al igual que R.E.M., en ese álbum comenzaban a labrar su camino hacia álbumes superiores, un mayor éxito y una mayor exposición mediática que los llevarían a ser los padrinos del rock alternativo estadounidense.


7. Spacemen 3 - Sound Of Confusion

La fascinación por lo lisérgico y lo atmosférico en el underground de 1986 quedó bien reflejada en el álbum debut de Spacemen 3. Usando efectos como el tremolo y el fuzz lograban distorsiones bien crudas que se repetían constantemente y sin parar como si se tratara de un ruido blanco alterado, llevando al garage rock por una dirección que en la actualidad es explorada por King Gizzard & The Lizard Wizard, por dar un ejemplo. Con ese sonido a bordo demostraron que se les daba tan bien rehacer totalmente canciones como "Rollercoaster" de The 13th Floor Elevators o actualizar los años sesenta en canciones propias como "Hey Man". Fácilmente 'Sound Of Confusion' puede ser el disco que más mentes voló desde el 'The Piper At The Gates Of Down' de Pink Floyd, con ese acople intenso, sobrecargado e hipnótico que retumbaba una canción tras otra.


8. The Go-Betweens - Liberty Belle And The Black Diamond Express

Estados Unidos tenia a R.E.M., Inglaterra a The Smiths, y Australia a The Go-Betweens. Con la clara intención de ser más exitosos en el plano comercial, 'Liberty Belle And The Black Diamond Express' suena más pulido y melódico que sus primeros discos, dejando ver influencias de la Invasión Británica o de The Byrds en los punteos de la guitarra. No fue muy exitoso (una constante a lo largo de su carrera) pero es un trabajo que destaca con luz propia por lo sofisticadas que eran sus composiciones, recurriendo más a escribir novelas de 3 minutos como "Spring Rain", "The Ghost And The Black Hat" o "Head Full Of Steam" que siempre suenan mejor con el gran trabajo de armonias por parte de los vocalistas Robert Forster y Grant McLennan.


9. The Smiths – The Queen Is Dead

No cabe duda. Es el punto máximo de la carrera de The Smiths. Morrissey canta mejor que nunca, Johnny Marr lleva al limite su estilo de guitarra retro intrincado, las letras eran tan satíricas como melancólicas y . Se le suele considerar como el mejor álbum del indie de todos los tiempos (incluso hay quienes lo consideran el mejor de toda la historia), y no es difícil entender la razón. Un disco tras otro van apareciendo auténticas maravillas del tipo de "I Know It's Over", "Cemetary Gates", "Bigmouth Strikes Again", "The Boy With The Thorn In His Side" o la inmortal "There Is A Light That Never Goes Out".



10. Varios Artistas - C86

El año cero de lo que hoy conocemos como "musica indie" fue 1986. Todo gracias al NME y el lanzamiento de un cassette bautizado como C86. En él grupos como Primal Scream, The Soup Dragons, The Pastels, Wolfhounds, The Wedding Present, The Mackenzies o McCarthy inauguraron el jangle pop. Un sonido con estructuras que se originaba en la Invasión Británica de los sesenta y el power pop de los setenta, aplicando algunas enseñanzas de bandas como Orange Juice o The Associates. C86 fue la confirmación de que los años sesenta estaban regresando en la música, constituyéndose en el primer paso de varios que se darían a lo largo de los años para llegar al britpop en la década siguiente.

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