Reseña: Chetes - Stereotipos

Se nota el esfuerzo de darle un rollo diferente a varias de sus canciones, sorprendiendo a su publico y a él mismo en el proceso.

Hoy por hoy Luis Gerardo Garza (conocido en el mundo musical como Chetes), fácilmente puede ser el solista más interesante que tiene para ofrecer México. Avalado por lo hecho en proyectos anteriores como Zurdok y Vaquero, forjó una carrera en solitario que curiosamente se aleja bastante de lo que hacia en esas bandas. Más acústico (aunque sin caer en el folk) y pulido en la producción, encontró el éxito comercial y la aclamación que le era esquiva en sus proyectos anteriores desde que debutara como solista hace 10 años con 'Blanco Facil'.

En ese tiempo tuvo tiempo para lanzar dos álbumes más, un EP, colaborar en sendos tributos a Bronco y Julian Infante así como trabajar junto a bandas amigas que han sido influenciadas por el cantautor (concretamente por lo hecho en Zurdok) como es el caso de Zoé o Hello Seahorse!, y hasta para regresar con Zurdok en 2014 para una serie de shows y grabar un par de canciones nuevas. 

Luego de concluir la reunión con su antiguo grupo retoma su carrera solista con 'Stereotipos', un álbum que por encima de todo es versátil. En la primera mitad del álbum deja ver ejemplos de cómo maneja el rock-pop en "Éxtasis Ultra Deluxe", "Sueños Perfectos" y "Agujero Negro" con autenticidad y sin caer de forma tan obvia en formulas radiales. En la segunda de ellas colabora Alejandro Rosso de Plastilina Mosh en los teclados, lo que explicaría por qué consigue ser la más movida entre todas las canciones del disco.

En otros temas como "Premoniciones", "Libre" o "Sujétame" Chetes elige ser más elaborado, recordando a ratos el ejemplo de gente como Soda Stereo o el lado más pop de Los Bunkers en el manejo de las guitarras y la forma en que logra con esas canciones una atmósfera más introspectiva y muy ligadas al auto examen en sus letras, rompiendo de alguna forma con el tono más romántico de los otros temas.

'Stereotipos' oscila todo el tiempo entre sencillez y complejidad. No obstante, en medio de eso Chetes celebra su vida de padre y esposo en la acústica "Nosotros Dos" a dúo con su esposa Carmella, su amor por The Beatles en "Flotar", le pone algo de reggae a "Ella" o cede al influjo irresistible de las guitarras eléctricas en "Nosotros Contra El Mundo".

Hablamos entonces de un trabajo donde la clave más que nunca está en los muros de sonido que sabe armar Chetes para cada canción. Ya sea que quiera sonar más pop, más rock o más raro, por encima de todo es fiel a sus convicciones con respecto a lo que hace buena una canción. Es un tipo que aun manejándose siempre en las mismas coordenadas musicales y en lineas generales apostando a lo seguro, todavía busca fuego a la hora de componer con todo y que ahora se pega más de la experiencia acumulada. Se nota el esfuerzo de darle un rollo diferente a varias de sus canciones, sorprendiendo a su publico y a él mismo en el proceso. No es su mejor álbum en solitario ni mucho menos, pero siendo un trabajo más adulto que los anteriores sigue siendo uno muy disfrutable.

Mi recomendada es "Éxtasis Ultra Deluxe". Entre la cuota rock-pop, es la más lograda.

Aquí va "Flotar".

Calificación: 4/5