sábado, 18 de enero de 2014

Retrospectiva: Van Halen y 1984, o el día que Michael Jackson tembló


Por encima del resultado de un choque de egos, es la confianza en el cambio. La confianza en "saltar" al vacío.



Dentro de esa particular re estructuración a la que viene sometida este regreso, llega una sección que cumple con un objetivo: recordar esos lanzamientos que jugaron un papel determinante en el desarrollo comercial o artístico (o de ambas cosas) en el mundo musical durante un momento determinado. Seguramente no siempre serán los mejores lanzamientos, o el impacto que tenga ese determinado disco no sea el mas grande o el mas positivo todas las veces; pero son discos que de alguna forma hicieron que la gente hablara sobre esa banda y esas canciones, ya fuese para alabarlos o atacarlos.

En este caso, hablamos de un álbum que marcó historia desde la primera hasta la ultima canción por una serie de razones que trascendieron no solo a la banda de Los Ángeles, sino al hard rock. Incluso, y como descubrirán en las siguientes lineas, hizo que hasta Michael Jackson palideciera a su lado. Es el momento de hablar de Van Halen y su disco 1984 que, curiosamente, vio la luz un 31 de diciembre de 1983.

Contexto


Hacia 1978 cuando la fiebre del punk de la escena de Nueva York perdía su importancia para las disqueras, al otro lado del país había cuatro personajes que mezclaban su fijación con el sonido de la Invasión Británica de los sesenta, y el hard rock de grupos como Kiss, Aerosmith, Led Zeppelin o Queen. A eso le sumaban una visita a la actitud y la estética del glam rock británico (principalmente de Slade y Sweet) para consolidar e inspirar a su alrededor un movimiento que, irónicamente, no alcanzó ni de lejos los niveles de calidad u originalidad que consiguió esta banda: el glam metal.

Ese grupo era Van Halen, donde tres cosas los hicieron rápidamente diferentes al resto: ritmo, virtuosismo, y una actitud machacadoras. El ritmo iba por cuenta del bajista Michael Anthony y ese animal de la batería que es Alex Van Halen. La actitud a pesar de correr por cuenta de los cuatro, cristaliza en su mayor expresión con la figura de David Lee Roth, un frontman que a pesar de algún comentario que escuché en That Metal Show en el que lo tachaban de ser un divo y un engreído (con justa razón, eso si), es indudable que tiene la chispa necesaria para hacer que 40.000 personas en un estadio lo aclamen como su Mesias del rock. Ademas, sin ser el letrista mas consumado, fue capaz de escribir la letra de "Jump" y dirigir su respectivo vídeo.

El virtuosismo va por cuenta del fiero pero magnifico guitarrista (y teclista, todo sea dicho) Eddie Van Halen. Sentido del ritmo fuera de clase, riffs y solos de guitarra que sirven de gasolina para que el fuego de Roth incendie cada estadio de la Unión Americana, letras que pasan de lo agresivo a lo romántico, pasando por lo pervertido; y con la particularidad de mezclar el sentido melódico de la Invasión Británica con la crudeza de los tiempos que corrían, para lograr condensar pasado y presente. Sencillamente, tenia en sus manos una formula de éxito imbatible desde cualquier punto de vista.

Desde el comienzo hicieron pedazos cualquier intento de competencia que pudieran tener. Empezando con un debut homónimo en 1978 que entre su versión de "You really got me", el instrumental "Eruption" (donde arranca oficialmente la historia del tapping) y "Runnin' with the devil" les permitieron despachar mas de 10 millones de copias. En Van Halen II mantuvieron la idea inicial y permitieron que "Dance the night away" y "Beautiful girls" fueran éxitos comparables a los del debut. Women and Children First cierra el que se podría considerar el punto mas "heavy" de la banda, a la par que los mantiene en la cima. Y es allí donde todo comienza a cambiar.

Porque, virtuosismo y locura se llevan bien arriba de un escenario, pero al bajar de el será cuestión de tiempo para que ambas partes se declaren la guerra. Y es así que para 1981 surgen las tensiones creativas y personales entre David y Eddie. El primero buscaba mantener la "mezcla de religión y hockey" que los hizo legendarios al comienzo, mientras que el segundo buscaba componer letras mas maduras y hacer en general un sonido mas elaborado que el que venían haciendo hasta ese momento. De esa forma en 1981 y 1982 aparecen respectivamente Fair Warning y su disco de covers Diver Down, que reflejan ese choque de ideas inicial. Si bien ambos implicaron una baja de ventas considerable, ya daban una idea del camino que transitaría Van Halen en 1984. Mientras tanto, Eddie participa de forma fugaz en una sesión de "Beat it" para grabar el respectivo solo del aclamado tema de Michael Jackson...

El disco


Varias cosas cambiaron en la concepción de 1984. Por un lado, no graban en los Sunset Studios de Hollywood como era la costumbre hasta entonces, sino en el estudio de la casa de Eddie Van Halen bautizado como 5150 (que a su vez seria el titulo para el primer trabajo que harían con Sammy Hagar como vocalista), con el fin de que el guitarrista tuviese un control absoluto sobre el producto final.

A raíz de lo anterior es que aparece el cambio mas importante en el sonido de la banda: el protagonismo de los teclados en varios tramos clave del álbum. En un momento en que la new wave y el synthpop hacen de las suyas y donde grupos contemporáneos a ellos como Toto, Rush o The Cars (que en esencia seguían la misma idea musical de Van Halen sin pertenecer necesariamente al mismo genero) incorporaban teclados como una forma de darle mas fuerza a su propio sonido, Eddie sintió que el grupo debía acoplarse a los tiempos que corrían antes que quedarse anclados en su glorioso pasado.

El otro cambio fue fatal para el futuro de Van Halen: mientras en los trabajos anteriores (incluso en los que el choque de egos entre Eddie y "Diamond Dave" era ya evidente) existía cierta democracia en la creación, para 1984 el guitarrista asumió el control absoluto de la composición, y exigió a la banda acoplarse a esa visión. Por supuesto, Roth no se tomaría nada bien el cambio, así como no se tomaría nada bien la participación de Eddie en "Beat it", cosa que a la larga permitirá al vocalista establecerse como un contrapeso a ese marcado autoritarismo. Eso y la gran labor de su eterno productor Ted Templeman, que pudo hacer que los egos se aplacaran lo suficiente para que el resultado no se viese afectado.

Al igual que ocurre con Fair Warning en su momento, en 1984 el choque de egos hace que los estilos de uno y otro se dispersen entre una canción y otra. Pero lo que en 1981 le restó fuerza al esfuerzo colectivo, ahora mantenía una lógica, conducida por el liderazgo de Eddie. Es así que encontramos que los teclados toman parte activa en la memorable "Jump" (donde aun así Roth hace que su impronta quede reflejada a la par con la de Eddie escribiendo la letra y dirigiendo el video), "I'll wait" (donde se alcanza a percibir la incomodidad de Roth cantando cuando solo tiene teclados marcando el ritmo) y el instrumental "1984". 


El pulso heavy de Roth se encuentra mas reflejado en "Top Jimmy", "House of pain", "Panama" y "Hot for teacher", donde hasta en los videos parece dominar la situación a su favor (sin ir mas lejos, en el vídeo de "Hot for teacher" Eddie termina en un manicomnio y Roth en Hollywood como presentador de TV). Por su parte, "Drop dead legs" y "Girl gone bad" si bien mantienen el tono típico del Sunset Strip en su letra, destacan particularmente por los arreglos ligeramente mas elaborados que poseen ya sea en las guitarras de la primera (con un sentido melódico mas marcado), o en la batería de la segunda, que le arma un muro de sonido preciso a Eddie para explotar su genialidad en la guitarra de una forma distinta a la que acostumbra.


Recepción


Desde el 21 de diciembre de 1983 cuando se lanzó "Jump" como sencillo, pasando por la extensa gira norteamericana por estadios del año siguiente, hasta el 2 de septiembre de 1984 cuando la banda concluía su presentación en la gira por Europa del Monsters of Rock en Nuremberg, Alemania (la ultima con Roth hasta 2007); el mundo "saltó" a su ritmo y al de nadie mas. El álbum alcanzo el #2 en el Billboard (solo superados por el Thriller de Jackson que contenía la "pequeña contribución" de Eddie en "Beat it"), consiguiendo emular el abrumador éxito de su debut de 1978, al superar también los 10 millones de copias.


En cuanto a los sencillos, "Jump" alcanzó el primer puesto sin oposición tanto en el Hot 100 como en el Rock Chart de Billboard, llegando incluso al Top 20 en las listas dance. El siguiente sencillo, "I'll wait" quedó en el #2 del Mainstream Rock Chart (superado por "Jump") y alcanzó el #13 del Hot 100, corriendo "Panama" la misma suerte. Curiosamente "Hot for teacher" a pesar de gozar del titulo de clásico de Van Halen por encima de "I'll wait" e incluso "Panama", no tuvo mucha suerte en su momento con las listas, alcanzando apenas el #56 en el Hot 100, y el #24 en el Mainstream Rock Chart.

Con respecto a la critica, es un poco extraño el hecho de que prácticamente no se mencionara en su momento la importancia renovada de los teclados en el sonido Van Halen (como si ocurrirá en su siguiente trabajo, para mal). Se concentraron mas en destacar el acople de la banda a una nueva generación de consumo que emergía a la par con MTV y que pronto los acogería en su gran y caprichoso seno, pero sin perder la chispa que siempre los hizo grandes. Esto ultimo es claro que va como un guiño a Roth por no permitir a Eddie salirse totalmente con la suya.

Legado

Los Duran Duran del glam metal (?)
En lo estrictamente musical, contribuyó junto al Metal Health de Quiet Riot a conseguir un espacio para que el glam metal de Motley Crue, Warrant, Poison o Ratt se consolidara como la pauta en el ámbito rock que haría de los ochenta una década tan amada y a la vez tan odiada en la cultura popular. En el aspecto técnico no incluye nada particularmente nuevo (aunque la atención renovada permitió que se reconocieran todavía mas las habilidades de Eddie como guitarrista), pero si demostró que el rock cuando se lo proponía, podía acoplarse hasta al peor de sus enemigos. Esto ultimo, tomando en cuenta que hubo un momento en el que se creyó que el sintetizador iba a sepultar las guitarras en el baúl del olvido.

Para la banda, fue el punto de quiebre definitivo en muchos sentidos. Roth decidió grabar como solista en venganza por la participación de Eddie en "Beat it", lo que el resto considero una falta de compromiso con la banda. El choque estaba mas servido que nunca, y Dave abandonó Van Halen para concentrarse en sus esfuerzos solistas. Su reemplazo seria Sammy Hagar, con quien se consolida el objetivo de Eddie de crear un sonido mucho mas maduro para la banda.

Pero la importancia de 1984 reside en una cosa por encima de todas: si antes eran el perfecto balance entre pasado y presente, con los teclados Van Halen le agregaba el factor "futuro" a esa ecuación. Por supuesto, grupos como Europe o Whitesnake, representantes del lado extremo como Judas Priest o Iron Maiden, y hasta sus admirados Kiss o Aerosmith seguirían ese camino en sendos discos o sencillos. Algunos lo harían con mas originalidad y conciencia de evolución que otros, que solo buscaban que la fama les llegara con mas rapidez. De ellos, Europe queda en el termino medio: se apropió de la formula de "Jump", pero igual construyó con "The final countdown" una joya pegadiza y muy bien trabajada desde cualquier punto de vista.


Incluso cuando se mira mas allá en la historia, encontramos que grupos del alternativo inspirados en el pop como Weezer o Fountains of Wayne hablan de una influencia importante del 1984 no solo en los sonidos, sino en lo que debe representar una banda para su público: reinvención y confianza en su propio trabajo. Porque si algo es 1984 por encima del resultado de un choque de egos, es la confianza en el cambio. La confianza en "saltar" al vacío.

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