lunes, 19 de enero de 2015

Reseña: Enter Shikari - The Mindsweep


Increíblemente,es más desafiante y ambicioso que su antecesor.

Enter Shikari es sin duda un descubrimiento bastante extraño de mi parte. Ni siquiera recuerdo como llegué a ellos, pero en cambio se que la primera vez que los escuche no estaba preparado para algo así de agresivo y desgarrado. Creo que debí conocerlos un poco antes de que lanzaron A Flash Flood Of Colour en 2012, y aunque admitía que había cosas interesantes, sencillamente no era el momento correcto para escucharlos. Ahora que llegan con su cuarto álbum, The Mindsweep, no solo yo sino muchos más están sincronizados con lo que la banda de Hertfordshire tiene para ofrecernos.

Desde el principio tienen una idea clara de como es Enter Shikari. Drama y desesperanza bien articuladas en la voz y la electrónica de Roughton Reynolds, junto a la rabia que parece a prueba de balas en la guitarra de Liam Clewlow y la batería de Rob Rolfe. A eso se le suman las espesas lineas del bajista Chris Batten, configurando así un estilo que entre agresivo y desafiante, se abrió paso para hacer que incluso el NME los incluyera como una de las bandas revelación del 2007.

Luego de trabajar en su nuevo album desde 2013 y hacer un DJ Set en el Festival de Reading y Leeds bajo el seudónimo de Shikari Sound System, la banda finalmente llegó este año con una nueva placa que solo viendo los titulos de las canciones, pintaba mucho más ambiciosa que de costumbre.

Arrancan con "The Appeal & The Mindsweep I". Inicio monumental que entre toques hip hop, electrocore denso y guitarras violentas da una buena idea del nivel alcanzado en esta ocasión. Luego ya encontramos hardcore directo al grano en "The One True Colour" con algunos pasajes sinfónicos que mantienen la nota bien arriba. Sigue el caos industrial y cyberpunk de "Anaesthetist" y la frialdad melódica de "The Last Garrison", los dos sencillos bandera de The Mindsweep.

Rescatando algo de la melodía de "The Last Garrison" nos encontramos con una "Never Let Go For The Microscope" que recuerda un poco a los Linkin Park de A Thousand Suns. Electrónica inquietante, voces suaves entrecruzadas con hip hop, y la sensación de que los guitarrazos pueden caer en cualquier momento. No cabe duda de que cuando llega la hora de los screams, son en el momento justo y con un ambiente increíblemente temperamental. 

Un poco mas glitch pero en la misma linea aparece "Myopia", para anunciar que llegamos a la mitad del álbum. Eso si, cuando llega el momento del coro, nuevamente las guitarras se hacen cargo de armar el pogo en nuestra mente y de plasmar a fuego la frase "I’m beginning to get glimpses of what is called real life, he says, meaning misfortune". Enganchada aparece "Torn Apart", que parece regodearse en la inmensidad de la tristeza y la derrota, como el paso previo a la rebelión. 

Luego de un interludio nos encontramos con "The Bank Of England". Aludiendo a la crisis económica de los últimos años y señalando a la 'mano invisible' que el documental Zeitgeist puso en boca de todos, es lejos la canción más directa del álbum en lo que a letras se refiere, si bien es mas suave en comparación a lo que hemos podido escuchar hasta aquí. Sin embargo, "There's A Price On Your Head" pone nuevamente las guitarras al frente en lo que podríamos llamar el numero guitarrero de The Mindsweep.

Para el final nos dejan el piano desolado de "Dear Future Historians..." con un remate sinfónico en el final, y un ultimo momento de gracia con "The Appeal & The Mindsweep II". Nuevamente la electrónica rabiosa y los gritos se apoderan de todo para un ultimo momento de adrenalina en un trabajo que, increíblemente, es más desafiante y ambicioso que su antecesor. Y eso es mucho decir para un A Flash Flood Of Colour que se le consideró uno de los mejores trabajos del 2012.

De cualquier manera, así arranca el 2015. Aquí la nueva tendencia cobra vida en el panorama internacional. El hardcore se erige como el catalizador de un ambiente trastornado, violento, donde las filias y fobias se cobran la vida de muchos cada día. Y no es sólo el género, pues como se pudo evidenciar el año pasado muchas bandas indie tomaron elementos hardcore para armar algunos de los mejores trabajos de la década. 

Pero mas allá del momento de gracia, este es uno de esos discos que tienen la virtud de aparecer en el momento apropiado, con las letras y el sentimiento que se requiere en el mismo. Desgarre urbano en su máxima expresión, intensidad y rabia condenadas en un cruce entre hardcore y las virtudes del Yeezus de Kanye West.

Mi recomendada es "Never Let Go For The Microscope". A uno le cuesta creer que cosas así alcancen el carácter de 'virales' en estos días.

Aquí va "The Last Garrison".


Calificación: 5/5

No hay comentarios.:

Publicar un comentario